La lectura en voz alta en casa

Incluir en la rutina diaria de casa un momento para leer cuentos en voz alta no solo es posible, sino que es necesario e importante. Si eres docente, te presentaremos detalles un poco más a fondo en otro artículo.

Si eres madre o padre y tus hijas e hijos ya van a la escuela, no por ello dejaremos de lado la lectura en voz alta en casa, pues refuerza los lazos afectivos y potencia las habilidades que ya están desarrollando en la escuela. 

Si tus hijas e hijos todavía no van a la escuela, igual es importante hacerlo, ya muchos de ustedes habrán comprobado que los chicos lo disfrutan mucho y desarrollan habilidades como las mencionadas en el artículo Fortalecer habilidades con la lectura en voz alta

En la actualidad la cultura del libro impreso sigue presente, aunque también encontraremos cuentos en YouTube y otras plataformas que incluso se acompañan de imágenes y música.

En esta oportunidad queremos recomendar la lectura en voz alta «a la antigua», diría alguien, pero es por buenas razones:

  • Al leer el libro en voz alta ya sea a uno o más hijos, se crea un momento de intimidad y cercanía muy agradable.
  • La madre o el padre tiene mayor control de la interacción con los chicos: cuándo hacer pausas, preguntas, bromas, etc.
  • Gracias a este control, papá o mamá también pueden ir adaptando el cuento a la edad y el contexto de sus hijas e hijos. Puede que una niña tenga 5 años y su madre le lea un cuento para niños de diez. Entonces, puede hacer pausas para ir explicando algunas palabras o cambiar acciones que considere no apropiadas a la edad de su hija o hijo.
  • Escuchar a la mamá o al papá hacer voces y gestos mientras lee también activa la imaginación, pues las niñas y los niños se imaginan a los dibujos del cuento moviéndose y hablando como lo hace su madre o padre. En los cuentos en videos se deja poco márgen para la imaginación.
  • Cada persona desarrolla su propio estilo para leer o contar cuentos, no es que exista una forma «correcta».
  • Como dijimos antes, leerles en voz alta, en especial a los más chicos, los acerca a la cultura escrita y van aprendiendo que en los libros «hay cosas interesantes».

Sabermos que no es fácil tener una variedad de libros en casa, aunque a los niños y a las niñas no les molesta que les lea el mismo una y otra vez. Sin embargo, la sugerencia que podríamos dar, si el centro escolar tiene biblioteca de aula o general, es promover que se establezcan un sistema de préstamo de libros para llevar a casa.

Recomendaciones generales para padres y madres

Puede que no tenga mucho tiempo, pero trate siempre de leer el cuento antes, para decidir si es apropiado para su pequeña o pequeño. Tome en cuenta su edad y vocabulario, eventos familiares que hayan ocurrido y que puedan afectar.

Sería ideal incorporar la lectura del cuento en la rutina diaria, es decir, busque una hora y un lugar para hacerlo cada día. Pero, si no se puede por la escacés de libros, que sean uno o dos días a la semana. Puede hacer una pequeña decoración en ese rincón, por ejemplo, un cartelito en una página de papel bond con la frase «Hora de la lectura» o «Cuentos para Margarita y Sebastián» (el nombre de sus hijas e hijos), etc.

Antes de iniciar con estas rutinas, trate de acordar con los chicos que, mientras se está en la lectura, trataremos de poner atención, participar y no hacer otras actividades que no tengan nada que ver. Esto implica que la participación en la lectura sea voluntaria. Si uno de sus hijos no quiere participar en la lectura, permítale dedicarse a otra cosa que prefiera.

Busque desarrollar su imaginación: muestre la carátula del cuento y pregunte: «¿Quiénes serán estos?», «¿De qué tratará este cuento?», «¿Qué será lo que hará tal o cual personaje?» o «¿Qué le pasará…?». También, cuando pase una página y antes de leer la siguiente puede preguntar «¿Qué está pasando aquí?», «¿Qué se imaginan que dice tal o cual personaje?».

Desarrollar la creatividad y la imaginación es algo que nos sirve de por vida.